Sé que hacer buena ciencia e I+D+I es complicado.
Y que no es justo que te pidan ser un experto en tu área y que además también lo seas en estadística y data science.
Todo sería mucho más fácil si pudieras comunicarte con otro científico.
Alguien como tú, que entendiera tus problemas, pero que supiera traducirlos al lenguaje estadístico y fuera capaz de sacarle todo el jugo a tus datos. Esa es, precisamente, mi especialidad.
Que te desahogues con alguien que te entiende.
Que dejes de preocuparte por las matemáticas, o por el estrés de tener que aprender técnicas avanzadas de análisis de datos.
Que ya era hora.
Entro en “estado de flow" analizando datos. Pero no siempre fue así.
Conozco la sensación de terminar un experimento y no saber qué hacer después con los resultados.
Y lo peor, de no tener tiempo para aprender, ni a quién consultar.
¿Internet? Información desorganizada y contradictoria.
¿Estadísticos? Poco accesibles y jerga incomprensible.
Además, el ritmo de la investigación es frenético. ¿Quién puede permitirse destinar un contrato a tiempo completo para un analista de datos? Si lo que necesitas es sacar adelante el trabajo de laboratorio.
¿De qué iba a servir contar con un experto en datos dedicado exclusivamente a exprimir al máximo tus resultados y a diseñar experimentos con rigor estadístico?
Oh, wait…
En 2012 dejé la carrera de Medicina para ser biólogo. Sí, lo has leído bien. De Medicina a Biología.
Descubrí que, aunque había logrado entrar en una de las carreras más deseadas, mi pasión estaba en otro lugar.
Me formé como científico en todo tipo de laboratorios. Biología molecular, genética, neurociencia, ecología, microbiología, antropología.
Y esa experiencia me condujo a una inevitable conclusión.
Si hay algo que todas las disciplinas biológicas comparten, es la necesidad de analizar datos.
De dar respaldo estadístico a los resultados.
Por eso decidí convertirme en un biólogo de datos. Un “biodatólogo”.
Lo hice cursando posgrados en bioestadística y bioinformática. Obtuve el título de Doctor en el Departamento de Biomatemática de la Universidad Complutense de Madrid. Conseguí una ayuda postdoctoral Juan de la Cierva para aplicar la inteligencia artificial a datos biológicos.
Pero, sobre todo, me curtí analizando cientos de experimentos y datos reales.
Publicando artículos y colaborando con científicos de casi todas las áreas de las Ciencias de la Vida.
Al final, lo que me motiva es ayudar a otras personas.
Si puede ser a través de los datos, mucho mejor.
Respuestas inteligentes a preguntas biológicas
Biostatista es mi respuesta a una doble necesidad, que he detectado después de 12 años dedicado a la investigación.
La primera, contar con un experto en análisis de datos que además tenga dominio específico de la materia que analiza. En este caso, la Biología.
La segunda, poder acudir de forma recurrente a ese experto, sin tener que invertir tantos recursos como en un contrato full-time.
Para que tu proyecto de investigación se beneficie de la ciencia de datos más avanzada y puedas tomar mejores decisiones.
Para que dejes de perder tiempo y dinero con experimentos mal diseñados y análisis equivocados.
Para dar respuestas inteligentes a preguntas biológicas.
¿Todo listo para dar el siguiente paso hacia un futuro de innovación y éxito científico?
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